El mundo ha cambiado, las comunicaciones han cambiado… y esto solo parece el principio de lo que se avecina, una vez los «nativos digitales» (que nacieron ya en la era del smartphone, las tablets e internet de masas) tomen el mando del mercado laboral.Todavía recuerdo aquellos años donde ponerse a estudiar de noche era un momento tranquilo, en ausencia de cientos de mensajes diarios digitales provenientes de email, whatsapp, facebook instagram, YouTube… Y tu cerebro se concentraba sin muchos contratiempos, en ausencia de este «ruido» de fondo que ofrece la hipercomunicación constante.Últimamente tanto en los eventos como en los cursos de formación y la universidad, percibo cada vez una dificultad aparente de estar 1 hora (o apenas varios minutos), sin mirar de refilón el teléfono, sin pensar en hacerse la foto que mejor quedará en nuestras redes, o en simplemente leer un artículo con calma, paciencia, desentrañando sus matices… Qué decir de un buen libro.Las últimas investigaciones en neurociencia (atento a Olivier Piaguet, por ejemplo), indican que la multitarea compleja, hace que el cerebro sea menos efectivo, porque no puede estar centrado en varias cosas al mismo tiempo, eso es un mito: va de una tarea a otra, perdiendo recursos de «memoria». Lo peor de todo, que este tipo de actividad le va dejando marcado, mermando su capacidad de concentración.En el futuro, las personas con capacidad de enfocarse y concentrarse realmente (sea en una conversación, en un cliente, en una redacción, en un aprendizaje), serán realmente escasas, y supondrán un valor encomiable para cualquier centro u organización.La solución que parece más efectiva lleva miles de años con nosotros: Meditar. Y últimamente, el auge del Mindfullness, que no deja de ser una modalidad de meditación, que ya está siendo probada incluso para prevenir estrés postraumático en militares que van al combate, con mucho éxito.Ssssshhhhh…. escúchate y respira.
CONCIENCIA + EXPERIENCIA + CIENCIA
