Los juegos reducidos son cada vez más utilizados como un medio de preparación física específica realmente útiles, por cuanto que implementan desplazamientos, técnicas, resolución de problemas, táctica… propios de la modalidad deportiva.
Existen varias corrientes de pensamiento que abogan por una preparación física casi exclusivamente basada en este tipo de propuestas específicas y «funcionales», obviando algunos métodos más tradicionales (desde el entrenamiento de fuerza hasta recursos de acondicionamiento cardiometabólico).
Nos ha gustado mucho la comparativa efectuada por un grupo de investigadores bastante potente de cinco países europeos diferentes, donde se comparan los efectos a nivel de condición física comparando dos métodos: los juegos reducidos (SSG), y el SIT (Sprint Interval Training).
Lo que podemos apreciar claramente, en un mes de aplicación intensiva de ambos métodos, es que producen mejoras en la condición física, en algunos casos diferentes: mientras la expresión proteica del GLUT-4 mejora más en los juegos reducidos, la actividad de la Citrato Sintasa o el Rendimiento en Test Intermitentes, mejora bastante más con el protocolo inespecífico.
La conclusión es que posiblemente para provocar un buen acondicionamiento del deportista, será necesario utilizar ambos tipos de sistemas: más específicos, y también más orientados hacia al acondicionamiento cardiometabólico global.
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