Como cualquier profesión no reglada, la de Entrenador Personal no está exenta de la aparición de oportunistas, charlatanes, vende-humos y un largo etcétera de lo más variopinto.Uno de los primeros pasos que hay que dar para seguir avanzando en la creación de una profesión estandarizada, es el situarse de manera correcta dentro de las profesiones de la salud, sabiendo reconocer cuáles son los propios límites para los que uno está capacitado. Los grandes organismos mundiales en términos de certificación de entrenadores personales (NSCA y ACSM), llevan definiendo desde hace años este ámbito de práctica, que tienen a bien analizar en el artículo que os facilitamos de libre acceso Kompf y colaboradores.Si quieres encontrar respeto, integración y colaboración por parte de otras entidades sanitarias, ten claro cuáles son tus límites de actuación, encuentra a aquellos profesionales que pueden (y deben) cubrir esos apartados, y fórmate de manera continua para poder aportar la mejor actuación a tus clientes.Porque ser «personal trainer», es mucho más que ponerse una camiseta con ese nombre serigrafiado a la espalda (ni tampoco una serie de títulos, académicos o no, colgados en el despacho).
CONCIENCIA + EXPERIENCIA + CIENCIA.
